sábado, 20 de diciembre de 2014

IDEA 20: Una Poderosa Fe es Fundada en Cristo

He is Reisen. La creencia de que Cristo se levantó de
entre los muertos es un prinipio central del
cristianismo. Aquí se representa en el
fresco famoso de Piero della Francesca,
La resurreción .
No hay duda que Jesucristo es uno de los individuos más significativos en la historia. Quizás solo aquellos otros hombres de espíritu, Mahoma, Confucio, y Buda, rivalizan su influencia.  Hoy en día 2,2 billones de Cristianos creen que Jesús, un predicador judío en Judea, era el Mesías prometido por el antiguo testamento Judío; el hijo de Dios, encarnado como hombre, cuyo sufrimiento y muerte absuelve los pecados y promete la vida eterna a aquellos que abracen su mensaje. Su historia es contada por cuatro Evangelios del Nuevo Testamento cristiano, los cuales son considerados por la mayoría de los eruditos como el mensaje verdadero de Cristo, no así los hechos exactos de su vida. Ellos nos cuentan sobre su nacimiento divino, sus enseñanzas, milagros, muerte y su resurrección en cuerpo. Y en ellos se graba su desafío más difícil, una llamada radical para la caridad, expresada más simple y profundamente en el Sermón del Monte, y al perdón: Los Cristianos deben Amar a sus enemigos y perdonar a aquellos que pecan contra ellos. 

En los primeros años, en medio de grotescas persecuciones, el Cristianismo fue esparcido en todo el mundo romano a través del testimonio inspirador de los discípulos que habían conocido a Jesús. En el siglo cuarto, se había vuelto la religión oficial del imperio. Cuando cayó Roma, la iglesia Católica se convirtió no solo el repositorio de las enseñanzas de Cristo, sino de  sus Valores, un rol que mantuvo por siglos, soportando un gran cisma con la Inglesia Oriental Ortodoxa y la Reforma protestante que la dividió en una serie de sectas más pequeñas. Hoy, después de más de 20 siglos de la muerte de Cristo, El cristianismo permanece como una de las fuerzas más potentes del mundo. 

miércoles, 17 de diciembre de 2014

IDEA 19: Los Romanos Perfeccionan un Bloque de Construcción para Edificar

Una forma para que los constructores puedan cubrir una habitación o soportar el peso sobre la entrada de una puerta es sentar una viga horizontalmente a través de dos pilares verticales. Este tipo de construcción "posicionar y viga" es uno de los métodos más antiguos de edificación que se conoce, remontándose desde Stonehenge y aún más atrás. Pero puede soportar un límite de peso antes de que la viga colapse y caiga bajo el estrés. 

Acueducto de Segovia
Coliseo Romano
Los Romanos tuvieron una idea mejor; El arco, un vano curvo hecho de piedras separadas en forma de cuña, que se posicionan hasta unirse en la parte superior en una "piedra angular", convirtiéndose en el punto focal de la presión ejercida hacia abajo por cualquier carga que el arco estuviese soportando.

   

Los Romanos no inventaron el Arco. Lo tomaron prestado de los Griegos (qué raro), y había sido usado por otras culturas más antiguas, incluyendo a los Egipcios y a Mesopotamia,  pero los Romanos encontraron una manera de hacerlo soportar cargas más grandes. Lo esencial para esta mejora fue la creación de una variedad de concreto particularmente fuerte, una mezcla de rocas, cal y arena de ceniza volcánica. Este material hizo posible Arcos de vanos amplios, lo que se convirtió una característica regular en construcciones monumentales, como los coliseos que aparecieron a lo largo del Imperio Romano. 

Panteón Romano; Visión interior.
Nótese la cúpula.
Con el Arco también se volvió posible para los Romanos el construir los largos acueductos que traían agua a los pueblos a través del Imperio. El gran Arco del triunfo, erigido para marcar victorias militares, se volvió una de las estructuras características de la era imperial, y  fue el arco que eventualmente hizo posible la cúpula, que está dentro de las innovaciones principales de la arquitectura romana y que trajo a la perfección el magnífico Panteón Romano, siendo todavía la cúpula de hormigón sólido, no reforzada, más grande del mundo. 

Panteón Romano
Aun cuando el Imperio fue en decadencia, el Arco perduró. Fue una particularidad de la arquitectura románica al principio de la edad media. Más tarde, arquitectos medievales lo adoptarían para los arcos puntiagudos de las Catedrales góticas. Y muchos de los arcos y cúpulas construidos por los mismos Romanos han sobrevivido hasta nuestros días. Fue una forma hecha para durar...y así ha sido.



martes, 16 de diciembre de 2014

IDEA 18: Los Escépticos Preguntan: ¿Es Posible Saber Algo con Certeza?

¿Cómo sabes que lo que "sabes" es verdadero? ¿Cómo puedes estar seguro que no estás soñándolo? ¿O que tu mente no ha sido programa de alguna forma para creer en una "realidad" que de hecho es simulada? Estas preguntas no comenzaron con la trilogía clásica de ciencia ficción, Matrix. Esto perturbó a algunos de los primeros filósofos Griegos y ha continuado preocupando a muchos pensadores desde entonces.

Los primeros Griegos inquisitivos fueron los filósofos quienes se hicieron llamar a sí mismos "Escépticos", una escuela de pensamiento rastreable a Pirrón de Elis, quien estuvo activo alrededor de 300 a. de C. Debido a que no dejó registro escrito, sabemos de su trabajo a través de una figura mucho más tardía, Sexto Empírico, un filósofo romano del segundo siglo después de cristo, quien describió el sistema de Pirrón en uno de sus libros. Como muchos de los filósofos griegos, Pirrón estaba preocupado por la falta de fiabilidad de los conocimientos adquiridos a través de los sentidos, y concluyó que, debido a esa falta de fiabilidad, el verdadero conocimiento de cualquier tipo, incluyendo conclusiones morales y éticas, es imposible. Para decirlo sin rodeos, como hiceron los escépticos, es imposible hacer cualquier declaración que descanse en una base más firme que de la exacta declaración opuesta. Y por esa razón, no tiene sentido incluso preferir un curso de acción  a otro, porque ambos se asientan sobre suposiciones improbables.

René Descartes, filósofo francés
En efecto, los escépticos tomaron del método socrático, con su constante cuestionamiento de creencias asentadas, a su extremo lógico, estipulando que ninguna creencia es de fiar, a no sostener ninguna posición. Es destacable que el escepticismo en sí sea una "creencia", lo que significa que un caso podría hacerse en apoyo de su opuesto, como "la creencia ciega", o el "dogmatismo", y un buen escéptico tendría que decir que sí, es posible. Pero las preguntas sobre la confiabilidad del conocimiento que los antiguos escépticos plantearon probaron ser muy difíciles de poner de lado. El el siglo XVII y XVIII volverían a ocupar las mentes de algunos de los más grandes filósofos europeos, incluyendo René Descartes y David Hume, quienes no  serían completamente capaces  de ponerlas a domir.